Acompáñanos en honor al Día Internacional de las Personas con Discapacidad para una conversación entre unas personas que experimentan una discapacidad. Reflexionarán sobre cómo la fe y la discapacidad se interrelacionan en sus vidas.
Gratis y abierto a todos!
Mi nombre es Aracely Baeza, y soy una mujer latina con discapacidad de Oklahoma que vive con una forma no diagnosticada de distrofia muscular congénita. Debido a mi discapacidad, uso una silla de ruedas eléctrica de tiempo completo y necesito apoyo diario para mis cuidados. A través de todo esto, mi fe católica ha sido un pilar constante en mi vida, dándome estabilidad y ayudándome a mantener una actitud positiva.
Mientras obtenía mi título asociado, enseñé catecismo de quinto grado en mi parroquia, Sagrado Corazon, durante tres años. Después de graduarme con mi titulo de bachillerato de la Universidad de Oklahoma en 2014, comencé mi carrera como trabajadora social en Caridades Católicas de la Arquidiócesis de Oklahoma City, donde sigo sirviendo a personas de bajos recursos y personas sin hogar, ayudándoles a trabajar hacia la vivienda, el empleo, la educación y la estabilidad a largo plazo.
En 2018, me uní a la mesa directiva de la Alianza Nacional Católica sobre la Discapacidad (NCPD), donde serví hasta 2024, incluyendo tiempo como encargada de Comunicaciones y Promoción.
Me siento bendecida de ser parte de una comunidad católica que apoya mi capacidad de vivir plenamente mi fe y continuar sirviendo a los demás, especialmente mientras navego la vida con una discapacidad.
Jorge nació en una familia de 4 hermanos siendo gemelo en el año 2000. Vivió una infancia feliz al lado de papá y mamá. A los siete años, regresando de vacaciones, en un accidente automobilistico, murió la mamá y Jorge quedó en coma. Después de 15 cirugias y 4 meses, regresó a casa. Con paralisis en pie y mano izquierdos, doble visión, convoluciones, y aparatos en su cuerpo para soporte, con esfuerzo y paciencia, logra salir de high school. Al llegar a la edad adulta y se entera que no puede hacer lo que los demás, le llegan las ideas de suicidarse. Cuando comienza a tener fe en Dios, su vida cambia y su propósito de vida también. Su fe es tan grande y pura que una persona puede tomar energia de él para sanar.
